viernes, 17 de abril de 2015

TEN CUIDADO DE LAS ASECHANZAS DEL DIABLO


TEN CUIDADO DE LAS ASECHANZAS DEL DIABLO
Cuando nosotros atravesamos por crisis emocionales, financieras, en nuestro matrimonio, en las familias, esas crisis están fundamentadas en una serie de estrategias implementadas por Satanás para nuestra vida y, por medio de ellas, llevarnos a una profunda depresión. Si realmente quieres vencer las asechanzas y métodos del enemigo necesitas a Jesucristo, y revestido con su armadura (Efesios 6:10-18), fundamentado en Su Palabra, la Verdad de Dios que hace temblar al diablo, podrás vencer; requiere sinceridad y estar dispuesto.
1 Pedro 5:8Sed sobrios y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar”. --- Cuida bien de tu relación con Cristo.  Aliméntate frecuentemente con la Palabra de Dios y fortalécete por medio de un buen tiempo de oración cada día. Andar junto al Señor es la mejor protección. Cuídate de las trampas de Satanás El diablo no va a aparecerte y decirte: Te quiero hacer pecar, sino que lo hará con: música, películas, distracciones, internet, y conversaciones. La tentación siempre empieza en la mente. El también pone la duda, y trata de conseguir que dudes de lo que Dios ha dicho sobre el pecado, la mentira, y la desobediencia que te llevan a la concupiscencia (malos deseos).
Santiago 1:15Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte”. --- Satanás quiere que creas que puedes liberarte solo y que puedes dejar la tentación en cualquier momento, pero su verdadera intención es seducirte más, su fin es esclavizarte y destruirte por completo.
Santiago 4:7-10 “Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros. Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones… Humillaos delante del Señor, y él os exaltará”. Solo Cristo tiene el poder para vencer y si eres obedientes sometiéndote a El, Tu también serás vencedor.