¡NO PUEDES DAR, LO QUE NO TIENES!
Salmo 90:14 “De mañana sácianos de tu misericordia, Y cantaremos y nos alegraremos todos nuestros días” La misericordia es una actitud bondadosa de amor y compasión hacia otros. En los hijos de Dios, es uno de los principales atributos divinos. La presencia de Dios misericordioso que perdona los pecados a cualquier persona que desea hacerlo, libera al ser humano de la esclavitud del pecado. Los que deseamos disfrutar de las misericordias de Dios debemos buscarle con una buena disposición de corazón, dejando nuestros malos caminos y malos pensamientos. Isaías 55:7 “Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar”. La verdadera misericordia debe brotar del corazón; Los verdaderos cristianos debemos cultivar la cualidad de la misericordia y reflejarla, tanto en aspectos materiales como espirituales, “con gozo”. En algunos la fe se debilita; ya sea porque están pasando por periodos de prueba: financiera, familiares y hasta de enfermedades; y los que somos maduros espiritualmente hablando, estamos en el deber y porque no decir en la obligación de mostrar hacia ellos misericordia, ya que si pasamos por alto esto hará que ellos se mueran espiritualmente y que expresen dudas del Poder de Dios. Es así como mostraremos la Gracia y Misericordia de Dios. Mi expresión siempre es: ¡No puedes dar lo que no tienes! Si tú no tienes amor, fe, compasión y misericordia; entonces dime: ¿que es lo que tienes? Si eres un(a) verdadero(a) hijo(a) de Dios; ayudarás al necesitado, al que esta desanimado, y le mostrarás que las misericordias de Dios son tan inmensas que quedan fuera de nuestra imaginación. Que su gran amor nunca se acaba, y su compasión jamás se agota. Salmos 138:8 “Jehová cumplirá su propósito en mi; Tu misericordia, oh Jehová, es para siempre; No desampares la obra de tus manos”. Cada mañana se renuevan sus bondades. Lamentaciones 3.22-23 “Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad”. Su misericordia se basa en su compasión por ti y por mí. La misericordia de Dios nunca disminuye con el desánimo, la irritación o el tiempo. Romanos 5.20 “Pero la ley se introdujo para que el pecado abundase; mas cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia”. A Dios nunca se le agota la compasión; cada día es un nuevo día con Él. Qué maravilloso es pensar de este modo al comenzar el día; El nos regala de su misericordia y compasión y están a nuestra disposición. ¡La misericordia de Dios nos renueva y nos da vida! Dios es quien nos renueva por Su Gracia y Su Misericordia. Dios es tan misericordioso que dio la vida de su Hijo para darnos salvación por medio de la fe en su sangre, sin nosotros merecerlo.
¡Este día, es tiempo que muestres misericordia para con los que te rodean!
