jueves, 19 de enero de 2012

¿TE SOMETES A LA DISCIPLINA Y REPRENSION DE DIOS?

¿TE SOMETES A LA DISCIPLINA 

Y REPRENSION DE DIOS?

La palabra de Dios como luz y como guía; ilumina el entendimiento para ir por el camino correcto; luz para los ojos a fin de descubrir la verdad; luz para los pies para ver la ruta que hay que seguir. Prov. 6:23Porque el mandamiento es antorcha, y la instrucción es luz. Y las reprensiones de la disciplina son camino de vida”. La luz de la Escritura es luz segura, pues nos revela la verdad eterna. Las reprensiones de la disciplina son camino de vida, ya que están destinadas a guardarnos, de la muerte. Disciplina es el conjunto de reglas para mantener el orden y la subordinación entre los miembros de un cuerpo. Reprensión: arrepentimiento, confesión, restitución, suspensión. El mayor bien que podemos hacemos a nosotros mismos es mantenemos lo más lejos posible del pecado. Proverbios 15:32. “El que tiene en poco la disciplina se desprecia a sí mismo, más el que escucha las reprensiones adquiere entendimiento”. No solo necesitamos instrucción, sino también reprensión para hacernos sabios; pero algunos no quieren consentir que se les de un buen consejo o se les enseñe sabiduría. He tenido ocasiones en que me buscan para darles algún consejo; 1- Lo primero que hago antes de dar el consejo es: Preguntarme si yo he pasado la misma situación y como la he superado. 2- Lo segundo es pedir al Espíritu Santo que sea el hablando a través de mi. Lo mas triste es que las personas buscan consejo pero no lo ponen por obra; quieren que se les diga de acuerdo a la intención o necedad de su corazón. El verdadero creyente que soporta la palabra de exhortación y reprensión está en proceso de reformarse y de adquirir entendimiento. Dios nos somete a disciplina para nuestra felicidad actual y nuestro bien futuro. Los que no respetan el orden o la disciplina en esta vida, no respetarían el orden que se observa en el cielo. Porque todos los que sean dignos de entrar en el cielo amarán el orden y respetarán la disciplina. Dios proporcionó el ejemplo definitivo de administración del tiempo y de orden en el libro de Génesis. En seis días, Él creó la tierra y todo lo que hay en ella, y el séptimo día descansó. Todo fue según el plan. Donde no hay orden no hay luz: Las pruebas no consisten en tratar de escapar a ellas, sino en transformarlas. Esto se aplica a toda la disciplina. Hebreos 12:6-11 “Porque el Señor al que ama,  disciplina, Y azota a todo el que recibe por hijo. Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos;  porque  ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina? Pero si se os deja sin disciplina, de la cual todos han sido participantes, entonces sois bastardos,  y no hijos…pero este para lo que es provechoso, para que participemos de su santidad. Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo,  sino de tristeza;  pero después da fruto apacible de justicia a los que en ella han sido ejercitados”. Dios es un Dios celoso y de disciplina, si queremos mejorar nuestra condición espiritual ante El Todopoderoso. ES NECESARIO SOMETERNOS A SU DISCIPLINA.