viernes, 9 de diciembre de 2011

¡SOMOS DICHOSOS EN CONFIAR EN DIOS!

¡SOMOS DICHOSOS EN CONFIAR EN DIOS!

En este mundo estamos expuestos e influenciados por todo lo que nos rodea; y es cuando los verdaderos hijos de Dios, determinamos si nos dejamos guiar por su corriente o hacemos viva la Palabra de Dios: Proverbios 4:23Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón: Porque de él mana la vida”. Es allí que en medio de la tentación tenemos que mostrar una buena y sana conducta. Nuestro Dios, es para nosotros el sol que ilumina y da vida, que guía e instruye. Estamos en continuo peligro, pero Él será escudo que nos defienda y proteja. Dios nos llena de su Gracia; que significa la buena voluntad de Dios hacia nosotros, así como la buena obra que lleva a cabo en nosotros; el honor que nos otorga al adoptarnos sus hijos, y darnos la herencia que nos tiene preparada en Cristo a los que andan rectamente. Esta es una promesa que comprende muchísimo y es una seguridad tan grande de paz y consuelo para nosotros, Sabiendo que, cualquier cosa que deseemos y que necesitamos, tenemos la certeza de que la obtendremos, si es un bien para nosotros. ¡Somos dichosos en  confiar en El!.  Salmo 84:12 “Jehová de los ejércitos, Dichoso el hombre que en ti confía”. Somos bendecidos los que disfrutamos de los privilegios de servir en la casa de Dios. Constantemente estaremos atacados por los problemas, y las críticas; En lugar de rendirnos dejemos que Dios nos alumbre el camino para la salida. Esta es una promesa de la cual debemos apropiarnos. Salmos 84:11 "Porque sol y escudo es Jehová Dios; Gracia y gloria dará Jehová. No quitará el bien a los que andan en integridad." Dios tiene muchas promesas grandiosas para nosotros si vivimos una vida agradable a El. Si nos alejamos del pecado y hacemos lo que es correcto, entonces Dios tiene cosas buenas para cada uno de nosotros. Los problemas nos llegan por diferentes razones, tal vez como una prueba para que podamos crecer espiritualmente, para que maduremos y formar carácter. Pero también los problemas nos pueden llegar como resultado de nuestra desobediencia a Dios, por nuestros errores los cuales nos traen malos resultados. Analicemos esto en nuestra vida, porque si andamos alejados de Dios es entonces tiempo para volvernos a Dios, pedirle perdón y enderezar nuestros pasos en el camino de Dios. Recuerda, mejor es confiar en Dios que en los hombres, y no confiar en: nuestras posesiones, en nuestra fuerzas e inteligencia. Dios nos ha provisto toda la armadura para defendernos y ganar. Jeremías 17:7 “Bendito sea el varón que confía en Jehová, y cuya confianza es Jehová”. Hebreos 10: 35-36 “No perdáis pues, vuestra confianza que tiene grande galardón; porque os es necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa”. 
!LOS HIJOS E HIJAS DE DIOS TENEMOS QUE MARCAR LA DIFERENCIA!.